lunes, 14 de marzo de 2011

Melomanía



Siempre había sido un enamorado de la música. Desde pequeño, cuando necesitaba tomar una decisión importante, encendía su tocadiscos y se sentaba a escuchar hasta obtener la decisión más adecuada.

Músico fracasado, no dominaba ningún instrumento y eso siempre le había pesado. Pasados los años descubrió que tampoco le hacía falta. Tras alcanzar las más altas cotas de poder, el general comprobó que con la simple ayuda de su pluma podía conseguir que la música sonara. Cada vez que garabateaba aquella firma retorcida en algún papel oficial una melodía de desesperación, miedo y desolación se instauraba en el país.

9 comentarios:

  1. Este micro me ha hecho recordar que Hitler era pintor, bastante mediocre, dicen.
    Un abrazo, Miguel

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  2. Torcuato pues no me había inspirado en él, pero ahora que lo dices vale perfectamente como ejemplo de lo que cuento.

    Gracias por pasar. Saludos

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  3. Muy bueno, la música que escucho al principio del relato es tranquila, algo tipo Bach, termina con la Danza de las Walkirias o algún Requiem.
    Un abrazo

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  4. Perfecto!
    A mi me encanta la música, ante todo el universo del heavy y del metal, que tiene su paralelismo con la música clásica y sinfónica... Comencé a leerlo pensando en un amante de la música, pero descubrí a una "persona" que tan sólo disfruta de una melodía terrorífica...
    Un abrazo!!

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  5. Eso que dice Torcuato creo que es extensible a bastantes dictadores: todos eran artistas fracasados.

    ¡Dios santo! Me están entrando ganas de fusila a alguien.

    PD Muy buen micro.

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  6. Anita Dinamita por desgracia la música final que se escucha no es la que nos propones, aunque desde luego le viene al pelo para comparar una y otra situación.

    Sucede es posible que al del micro también le guste la música clásica, lo que pasa es que cuando se queda solo le da por escuchar una música, si se puede llamar así, en la que sólo queda el miedo y los gritos de la población.

    depropio pues no te diría yo que no. Seguro que algo de eso hay. Espero que tus ganas homicidas se te pasen pronto. Gracias por tus palabras.

    Saludos para todos y gracias por vuestros comentarios.

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  7. Terrible forma de canalizar su frustración musical. El mundo nos está demostrando que cuando un director maneja su batuta y los músicos no le siguen, la melodía cambia. Buen relato con trasfondo social. Un abrazo.

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  8. Lo cuentas con gracia, pero en realidad da mucho miedo.Por lo real.
    salud.

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  9. Pedro Alonso algunos no saben cómo satisfacer sus frustraciones. Por suerte como dices tú en ocasiones los músicos no siguen el dictado del que manda.

    Joplin realmente da miedo porque es real como la vida misma y si no, ahí está algún ejemplo citado anteriormente. Es mejor ni pensarlo.

    Saludos para los dos.

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